La biometría cubre la medición de cualquier aspecto de nuestras características físicas humanas, desde la forma única de nuestra cara o nuestros dedos, hasta nuestro ADN, pero también, la biometría es usada en pagos con fines de autenticación para agregar mayor seguridad al consumidor y al comercio.
Recientemente han habido muchas conversaciones en torno a los biométricos y su papel en los pagos. La idea de que podemos pagar por bienes y servicios sin tener que llevar una billetera o incluso un teléfono móvil es ciertamente atractiva, pero ¿cuál es la situación actual y hacia dónde nos dirigimos?
¿Qué son los biométricos y cuáles son los tipos utilizados en los pagos?
Comencemos con una definición. La biometría cubre la medición de cualquier aspecto de nuestras características físicas humanas, desde la forma única de nuestra cara o nuestros dedos hasta nuestro ADN. El escaneo de huellas dactilares ha existido durante mucho tiempo y es uno de los puntos de datos biométricos más populares utilizados para la autenticación, desde la inmigración en un aeropuerto hasta el desbloqueo de sus teléfonos.
Cuando se trata de pagos, muchos métodos que leen datos biométricos son confiables, pero no todos son fáciles de administrar o socialmente cómodos de usar para los consumidores. A lo largo de los años, la industria de pagos se ha centrado más en dos enfoques principales, el análisis de huellas dactilares y el reconocimiento facial u ocular. Ambos enfoques se basan en lo que los consumidores de hoy en día ya conocen. La mayoría de las computadoras portátiles de gama alta están equipadas con escáneres de huellas dactilares para una mayor seguridad. Y si nos fijamos en los teléfonos inteligentes de gama alta, también podremos encontrar una tecnología similar para utilizar huellas dactilares o escaneo facial.
¿Cómo funcionan los pagos biométricos?
La biometría se utiliza en los pagos principalmente con fines de autenticación. Datos como huellas dactilares, escaneo facial u ocular pueden ayudar a verificar la identidad de la persona que paga. Todo funciona de dos maneras principales:
- La primera es mediante la autenticación de identidad por parte del cliente en su dispositivo (por ejemplo, la aprobación de una transacción en un teléfono inteligente utilizando el lector de huellas dactilares incorporado o el identificador facial). Este método es más común hoy en día con las billeteras móviles que utilizan el escaneo de huellas dactilares o face ID para ayudar a los clientes a pagar con tecnología contactless como Apple Pay y Google Pay.
- El segundo utiliza hardware en la tienda para capturar la imagen, normalmente una cámara de alta definición y una pantalla grande o una terminal punto de venta modificada que puede capturar esta información. Aunque es poco común en la región de América del Norte, este hardware en la tienda no solo puede ser útil para la aceptación de pagos, sino que también puede tener otras aplicaciones en el futuro, como la verificación de identidad y edad.
Biometría basada en el teléfono móvil
En casi todos los mercados del mundo, el modelo preferido es el uso de teléfonos móviles para la autenticación de ciertos procesos. Esto es impulsado principalmente por la confianza del consumidor en la tecnología. Un consumidor típico está feliz de tener su información biométrica almacenada en un dispositivo que posee, ya que parece que tiene más control sobre ella en comparación con un dispositivo externo. El segundo factor es el costo. Si el teléfono inteligente cuenta con tecnología de identificación biométrica, entonces, una vez aprobada, la transacción puede fluir a una terminal punto de venta estándar a través de la tecnología de comunicación de campo cercano (NFC por sus siglas en inglés) como una tarjeta contactless estándar o una transacción de billetera móvil. Para los comercios, esto significa que no necesitan hacer ningún cambio en su sistema punto de venta o hacer ningún trabajo de desarrollo complejo para el proveedor de servicios de pago.
La biometría no basada en teléfonos móviles es compleja
A medida que la biometría de pagos se aleja de los teléfonos inteligentes, el nivel de complejidad aumenta para los comercios. Hay una falta de estándares que hace que el despliegue de esta tecnología a nivel internacional sea muy difícil para los fabricantes y los costos de implementación pueden ser altos, por lo que los comercios pueden no considerar esta opción por completo. Por ahora, la biometría no basada en teléfonos móviles crea más desafíos para los comercios que desean adoptar esta tecnología.
¿Cómo se ve la evolución de los pagos biométricos en nuestra región?
En la región de América del Norte, la autenticación biométrica es real y ya está sucediendo, pero principalmente sucede en los teléfonos inteligentes. En este caso, hay muy poco impacto en un comercio o un proveedor de tecnología. Los teléfonos inteligentes pueden ejecutar análisis potentes y complejos en segundo plano, pero el comercio, simplemente ve una transacción sin contacto que puede soportar un valor de transacción más alto que normalmente podría aprobar.
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